FUENTE DE LOS ALISOS
DE
todos los milagros, el del agua
-dijo
alguien-,
una
humilde verdad que se repite
ante el
flujo incesante
de esta
fuente escondida
entre
alisos y zarzas
donde
cesa el verano
esta
tarde de agosto.
OVAS
ESAS
algas de agua
que
aquí llamamos ovas
también
estrenan verde
ahora
en primavera.
Un tono
tan intenso
como el
de todas las hojas,
que
debajo del agua
cobra
un matiz precioso.
Bailan
en la corriente,
las
observo moviéndose
y esa
danza ondulada
me
recuerda que antes,
hace
apenas dos meses,
eran
sombras apenas
bajo el
curso del río.
Han
resistido, vencen
a
crecidas, a rápidos,
a la
cruel turbulencia
del
caudal en invierno.
Son un
ejemplo, duran,
fueron
nada y son todo
esta
tarde de mayo
en que
esplenden al sol
mientras paso a su lado.
mientras paso a su lado.
de “El cuarto del siroco”, Tusquets, 2018
Muy bellos poemas, sencillos y auténticos. Gracias,
ResponderEliminarEs cierto Susana, son unos bellos poemas.
ResponderEliminarGracias a ti por tu cercanía.