Hablemos del destino.
Si uno es árbol, será papel.
Si uno es papel, será algún verso.
Si uno es verso, será dolor.
Si uno es dolor, será una roca.
Si uno es roca, será silencio.
Si uno es silencio, será un árbol.
Si uno es árbol, será papel.
Si uno es papel, será poema.
¿Sera eso lo que llaman el destino?
Hablemos del poema.
Volviste!!! :)
ResponderEliminarH E R M O S O
Quizás uno de los posibles destinos del árbol sea papel...abono para tierra cuando el fin de su ciclo vital lo tumbe a tierra, leña para la caldera,una silla...una mesa quizas...de todos estos destinos el árbol es elemento pasivo, en cambio el hombre pienso que es el unico ser vivo que tiene absoluto control de su destino, nos lo forjamos dia a dia con nuestros actos, los alcanzamos con fe y constancia, lo maldecimos cuando acabamos en laberintos sin salida....hablamos de poesia?
ResponderEliminarEl poema pasa por todo eso, incluido el destino. Muy bien hilado y muy certero. Ya tenía mono de leerte :)
ResponderEliminar¿Y si nosotros decidimos forjarnos nuestro propio destino y romper la rueda eterna?
ResponderEliminarEn eso estamos, Juan, aunque está un poco dificil. No es que no queramos, es que no nos dejan.
ResponderEliminar