lunes, 5 de julio de 2010

QUÉ RARO


Sonaba raro, sí.
Decirte yo algo
era como romper esas palabras no dichas,
era como si yo al decirte
algo, no sé,
que me sonaba raro
escuchar esa voz que ya conozco
para decirte aquello
que nunca pude, ni debí decirte.

Por eso, sí,
sonaba raro, sí,
que yo rompiera aquel silencio
y te dijera, vete,
cuando, tú, nunca habías venido.

Qué raro es,
perder algo que no se tuvo.

24 comentarios:

  1. Lo que no es raro es que me guste este poema.

    ResponderEliminar
  2. Nos adueñamos sin poseer por ser de tanto agrado o por costumbre tal vez... Si, es raro, como temer perder lo que no se tiene o dejar ir lo que con tanto ahínco se quiere. Raros somos nosotros...Qué más podría yo decir?

    Besos,

    ResponderEliminar
  3. La extrañeza de lo que nos pertenece en pensamiento y no es nuestro en la realidad material, esa perplejidad paradójica.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. La raro no es perderlo, lo duro y extraño es darse cuenta de que no lo has tenido ¿será que maquillamos sentimientos a la carta?

    Me gustó. Besos.

    ResponderEliminar
  5. Es raro pero a la vez es un descanso.
    Ya no se nota su ausencia.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  6. No se tuvo entre las manos, pero se tuvo en brazos de la mente... Esas son las pérdidas que más duelen: las que nunca fueron, porque en realidad nunca sabremos si pudieron ser. Bello y muy fluido tu poema, José Antonio. Abrazo grande.

    ResponderEliminar
  7. Pero... en definitiva,
    realmente somos "dueños" de algo?
    Siempre dudo de "poseer" algo.
    Incluso dudo, si soy dueña de mí misma.

    Caramba... este batidoexistencialistofrutal
    es un buen coktail para cuando estás pensando
    en voz alta.

    y es que lo raro siempre llama mi atención :)

    (me encantó, que lo sepas)

    Un abrazo!

    .·*

    ResponderEliminar
  8. Perder lo que no se tuvo es lo peor, porque sabes que aunque lo desees, jamás lo tendrás.

    ResponderEliminar
  9. Me ha encantado este poema, José Antonio. Es eso exactamente...también me gusta el comentario de "Toro salvaje" "Ya no se nota su ausencia", también es exacto y además me he acordado de "No se pierde sino lo que nunca se ha tenido" J.L.Borges.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  10. Cuando ella se ha ido él todavía esta allí.
    Me gustó este poema indeciso, inseguro, se masca la tensión y la angustia en el personaje.

    ResponderEliminar
  11. Raro, raro, raro....
    Raro extrañar lo que no existió.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  12. No es tan raro, cada día mueren miles de sueños. Y creo que tú pusiste fin al tuyo. Bien hecho, no hay que recrearse en el sueño no sea que caigamos en lo que llaman "el sueño eterno".

    Besosssss.

    ResponderEliminar
  13. Me encanta tu forma de decir adiós a lo que nos habitó sin saberlo. Un abrazo fuerte.

    ResponderEliminar
  14. Hay gente que se instala en nosotros sin pedirnos permiso, hay personas de las que nos despedimos y nunca supieron que habian llegado. Bonito poema. Saludos

    ResponderEliminar
  15. Tantas veces jugamos a poseer aquello que deseamos como inalcanzable, que cuando llega un instante de dura realidad, de desnudez total de uno mismo, nos damos cuenta de que creemos haber perdido aquello que de veras, nunca se tuvo.
    Sensacional poema.

    ResponderEliminar
  16. Me encantan estos versos que se pierden en el monólogo y se olvidan de que hay espectadores. Es un poema natural, desnudo.

    Es curioso que hace poco tuve el mismo sentimiento. Es raro sí; pero es real. Una contradicción, así somos...

    Un beso,
    Laura

    ResponderEliminar
  17. Gracias. Raro es que sigais por aquí, cosa que agradezco mucho.
    Abrazos.

    ResponderEliminar
  18. Querido José Antonio:
    RUBRICO TU DIVERTIDO Y CERTERO COMENTARIO (pese a ello, las myúsculas no han sido deliberadas). Raro es tu talento, tu sutileza intelectual para jugar con las palabras, con los sentimientos. Tu poema es más que raro: juguetón y desolado. Espléndido.
    Un beso y tres puntos para la cartilla de regalo por tu fidelidad.

    ResponderEliminar
  19. Encuentras raro que sigamos por aqui? pues ya ves que no lo es... algunos inisistimos... por algo será!

    Besos
    Marian

    ResponderEliminar
  20. Por eso, sí,
    sonaba raro, sí,
    que yo rompiera aquel silencio
    y te dijera, vete,
    cuando, tú, nunca habías venido.

    Lo que pasa es que, para cuando se dice vete y se rompe el silencio y la voz es conocida, ya es demasiado tarde saber que nunca había venido.

    ResponderEliminar
  21. Me gusta el poema y eso si que es raro en mí que huyo de los afectos humanos en la poesía quizá por temor a los apegos, esos que hacen sufrir y puede que por prudencia para no sucumbir de nuevo en los abismos que se abren en las viejas heridas. Me gusta, sí por su sencillez y por su clarividencia.

    Un saludo

    ResponderEliminar
  22. Sigo a Albert en su blog Impedimenta (valoro muchísimo su hacer). Leí tu comentario y he entrado ha visitarte. Este poema me ha gustado especialmente.
    Te invito a que visites mis blog: "Páginas escritas" (aprendiz de la expresión con la palabra) y "Escrito con el cuerpo" (mi actividad profesional: Danza y Expresión Corporal)
    Te visitaré.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  23. Me recuerda ese texto de Sabina: "No hay nostalgia peor que la de aquello que nunca jamás sucedió".

    emilia alarcón

    ResponderEliminar
  24. En nada me parece raro extrañar lo que jamás se tuvo,tendríamos que ingresar en un laberinto que defina lo que se considera por propio dentro de la mente,es un gran poema.De ésos que hay que releer de vez en vez.

    ResponderEliminar